A causa de las protestas por la devastadora explosión que ha dejado más de 200 fallecidos, el primer ministro de Líbano, Hassan Diab, anunció la renuncia de su gobierno.
«Hoy, anuncio la dimisión de este gobierno», dijo en un discurso televisado. «La catástrofe que afectó a los libaneses en el corazón (..) ocurrió a causa de la corrupción endémica en la política, la administración y en el Estado», añadió.
Lo catástrofe en Líbano, ocurrió por un incendio en un depósito donde se almacenaba 2.750 toneladas de nitrato de amonio.
Tras las manifestaciones de los últimos días, por las denuncias de corrupción, cuatro ministros pusieron sus cargos a disposición.
En las protestas del fin de semana, reprimidas por las fuerzas de seguridad, los manifestantes clamaban venganza contra una clase política acorralada. «Todos quiere decir todos», gritaban los manifestantes que desconfían de la clase política.
El primer ministro había asegurado que estaba dispuesto a mantenerse dos meses en su cargo hasta la organización de elecciones anticipadas.
