El desastre ambiental causado por Repsol en el mar de Ventanilla ha puesto a los pescadores del terminal pesquero en una situación crítica.
Contaron que desde que ocurrió el derrame de petróleo, hay menos afluencia clientes para comprar sus productos a causa de la desconfianza generada por ese evento que afecta a la ecología y a la fauna marina de la zona cercana de Ventanilla.
Los comerciantes del terminal pesquero aclararon que sus productos no están contaminados por el crudo ya que los obtienen del mar del norte del país o de altamar.
Ante la baja demanda, los comerciantes explicaron se vieron obligados a bajar los precios de los pescado y mariscos que venden, e hicieron un llamado al público para que aprovechen estas ofertas y se sientan seguros en el consumo.
«EL CANGREJO NO ESTÁ CONTAMINADO»
Refirieron que por ejemplo, el cangrejo es adquirido en los puertos de Pucusana y Pisco, al sur de Lima, por lo que están totalmente libres de contaminación.
“El petróleo solo ha afectado las aguas cercanas a Ventanilla. El cangrejo está limpio. Los estamos vendiendo a 30 soles la docena, cuando antes se ofrecía a 40 soles la docena”, dijo un comerciante.
Explicaron, además, que los productos hidrobiológicos que ofrecen pasan a diario por la evaluación y certificación de los ingenieros pesqueros de los organismos sanitarios del Estado.
“Ellos (los ingenieros) pasan en cada momento y verifican que los productos son buenos, No hay problema, no tengan miedo sigan consumiendo”, enfatizaron.
Aseguraron que los pescados que venden, como la merluza, la cabrilla y el perico vienen de Piura, Paita o Chimbote.
«EL PESCADO NO VIENE DE VENTANILLA»
“No viene de Ventanilla, que no se asusten, el pescado es más saludable que el pollo”, dijo una vendedora.
Pidieron a los clientes aprovechar la oferta de la merluza que se vende a 10 soles el kilo, cuando antes era 15 soles, mientras que el perico se ofrece a 15 soles, cuando antes se compraba a 20 o 23 soles el kilo.
«Puede preparar un rico ceviche de cabrilla, que está a 10 soles fileteado, es delicioso, rosadita, fresquecita», expresaron.
