Un padre de familia que se dedicaba al reparto de agua en asentamientos humanos de Santa Rosa y Ancón, fue asesinado de varios balazos. Sicarios lo interceptaron cuando manejaba su camión cisterna hacia una zona que no cuenta con servicio de agua potable.
George Anchayhua (31) fue acribillado en uno de los vehículos heredados por su padre, que falleció hace algunos meses a causa de la COVID-19.
El crimen ocurrió poco después de las 9.30 de la mañana en el cruce de las calles Retamas y Pisonay, en la asociación ADESESEP, en Santa Rosa. Dos sujetos se acercaron por el lado del chofer y, desde afuera de la cabina, abrieron fuego contra la víctima.
Acto seguido, uno de los delincuentes fue tras el ayudante para matarlo y no dejar testigos. Por suerte, el sicario se le trabó el arma, por lo que se salvó al correr hacia el cerro.