La tragedia de la discoteca Thomas Bar en Los Olivos no dejó lecciones. En pleno avance del coronavirus en nuestro país, siguen las fiestas clandestinas entre los ciudadanos.
Durante el mes de agosto, la línea 105 de la Policía Nacional recibió más de 1000 llamadas telefónicas en las que se denunciaron eventos sociales y fiestas.
Cientos de compatriotas no cumplen con las disposiciones para evitar la propagación de la Covid-19 y desafían a la autoridad pese a que Perú es el país con mayor número de fallecidos del mundo por millón de habitante.