Cuatro personas murieron tras un ataque con cuchillo y un atropello en la ciudad de Beersheva, al sur de Israel.
Según el diario Haaretz, que citó fuentes de la policía, el atacante era un residente beduino de la región que apoyaría al Estado Islámico, y que fue «neutralizado» por un conductor de autobús en el lugar de los hechos.
«Tres personas fueron apuñaladas hasta la muerte y una cuarta, que montaba en bicicleta, fue arrollada por un automóvil conducido por el atacante», dijo Eli Bin, jefe de servicio de emergencias MDA.
Un viandante armado disparó y mató al atacante.
La organización terrorista Yihad Islámica (prohibida en Rusia) alabó el ataque de Beersheva. Su portavoz Tariq Silmi declaró «los actos de resistencia detendrán la ocupación», según Kan.Según concretó, el ataque se desarrolló en distintos puntos, y empezó cuando el atacante apuñaló a una mujer en una gasolinera. Luego siguió con su coche hasta el área de un centro comercial, donde atropelló a un ciclista.
Tras ello, se desplazó al otro lado de la calle. Ahí se bajó del coche y agredió con el cuchillo a otro hombre y una mujer, tras lo que fue abatido por un transeúnte que pasaba por la zona.
